Hay un concepto bastante difundido que sugiere (erróneamente) que los hombres que tienen sexo con hombres (HSH) no necesitan cuidarse. Esta actitud, absolutamente peligrosa, demuestra que aún existe un largo camino por recorrer en materia de prevención de enfermedades de transimisón sexual.
El hombre ha sido culturalmente entrenado para ser valiente, arriesgado, casi inmortal, y un hombre que se «cuida«, que busca «ayuda» a la hora del sexo, «no es un hombre», pues los hombres «no lloran» y tampoco «se protegen».
El grupo de HSH (hombres que tienen relaciones sexuales con hombres) sigue siendo el más peligroso y potencialmente mortífero de los hábitos que pueblan las preferencias sexuales en todo el mundo.
Debemos recordar que las principales ETS se contagian al momento de entrar algún fluido de la persona contagiada con las mucosas de otra persona. En el caso del sexo anal, práctica habitual en las relaciones HSH, microheridas en el ano son más que suficientes para permitir el ingreso de peligrosos microorganismos (virus, por ejemplo).
Existen en el mercado preservativos especialmente formulados para el denominado «sexo fuerte» que serán de vital importancia en este tipo de sexualidad. Si no dispones de esos preservativos fabricados con látex reforzado, puedes colocarte 2 de los comunes y correrás menos riesgos de que se rompan en el momento menos indicado.Protegerse y proteger a tu compañero en el sexo HSH es un síntoma de madurez, responsabilidad y salud. Sólo tomando las medidas de precaución necesarias, podrás disfrutar de una sexualidad plena, elegida, adulta y sumamente placentera.
