Un grupo de científicos en Washington liderados por Ivanka Savic y Per Lindström, han publicado sus «descubrimientos» en la revista Proceeding of the National Academy of Sciences, y tales informes no son otra cosa que una puerta abierta (una vez más) a la polémica sobre si la homosexualidad es una circunstancia heredada o aprendida.
Estudios realizados en laboratorios de conducta, demostrarían que las personas homosexuales tendrían un cerebro similar al del sexo opuesto. Esto es, el cerebro de un gay tendría un gran parecido al de una mujer, mientras que el de una lesbiana, se asemejaría al cerebro de un hombre heterosexual.
Este anuncio vuelve a cargar las tintas sobre un asunto de vieja data: homosexual, ¿se nace o se hace?
Aunque estos estudios tienen implicancias neurobiológicas, las evidencias son irrefutables sobre la simetría que existe entre los cerebros homosexuales entre sí, y los heterosexuales entre sí, mientras queda demostrada la asimetría entre homo y heterosexuales.
Por ahora el estudio no va más allá en sus razonamientos y derivaciones, pero suponemos que no será la última vez que escuchemos sobre un «descubrimiento» de esta naturaleza.