Los estudios que realizan las Universidades de todo el mundo, por lo general, arrojan luz sobre ciertos temas de los cuales se carece de información confiable. Este ha sido el caso de la Universidad de Rochester (USA) que dedicó varios meses al estudio del impacto que producen los colores en las respuesta sexuales de ciertos individuos.
La experiencia se llevó a cabo con 100 estudiantes universitarios a quienes se les mostró una serie de fotografías de señoritas muy atractivas. Y ante la pregunta ¿con cuál de ellas estarían dispuestos a mantener un encuentro sexual?, la gran mayoría eligió la misma fotografía. Lo singular es que esa fotografía poseía un fondo de color rojo sobre el cual se destacaba la señorita fotografiada.
Esto parece demostrar que no en vano, la humanidad ha identificado a lo largo de los años al color rojo como sinónimo de pasión y romance. El doctor Andrew Elliot afirma que este comportamiento obedece a primarios instintos de nuestro cerebro de simios y que el color rojo connota una carga sexual a la cual los hombres difícilmente puedan resistirse.
Un detalle muy llamativo es que un experimento similar realizado con mujeres no llegó a igual término, pues las seleccionadas eligieron las fotografías en función de lo que sentían o podían percibir, sin prestar demasiada atención a los colores y a la composición cromática de las imagenes.
