De todos es sabido que en China la censura está a la orden del día. No es difícil imaginarse la que se ha formado cuando se ha descubierto a un grupo de parejas (y bastante amplio, además) que se dedicaba a realizar orgías, tanto en casas particulares como en hoteles.
Las orgías se convocaban a través de Internet, y a ellas asistían varias parejas que se dedicaban a realizar lo que se da en llamar (en China por lo menos) “conductas grupales licenciosas”.
Varios de los implicados han sido condenados (sí, aunque no lo parezca, existe una ley destinada a este tipo de cosas), pero esto no es lo más grave. Es que la situación ha hecho que se abra el debate en torno a la libertad sexual en China.
Los chinos empiezan a plantearse hasta qué punto el Gobierno tiene derecho a juzgar y decidir acerca de los gustos y las prácticas sexuales de cada uno.
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Vía| aguasdigital
Foto de nomchings
