Algunas personas disfrutan de su pacífica asexualidad, otras rechazan al sexo por diversos motivos… algunos parecen nacer así... elección o naturaleza, poco se sabe sobre la asexualidad.
Opinan los expertos que es sumamente difícil estudiar algo «que no está» y como los sujetos de estudio no tienen interés en la cura, pocos se presentan para ser utilizados como conejillos de indias…
La asexualidad se define, simplemente, como la falta de orientación sexual. Sin embargo no es tan simple, hay asexuales que se enamoran y viven en pareja dejando de lado la actividad sexual. No sienten deseos por el placer sexual. Es muy difícil definir, en este tipo de relación, de qué manera se diferencia de la amistad.
Otros, más extremos, viven en soledad y rechazan, no sólo la actividad sexual sino todo contacto con el sexo opuesto, en un comportamiento similar a una fobia u obsesión llamado anorexia sexual.
Hay quienes argumentan que no es una orientación sexual en sí misma (en realidad sería, mas bien, una falta de orientación) y que puede tener diferentes motivos: hormonales, extrema timidez, sublimación, traumas infantiles, homosexualidad reprimida, etc.
Se calcula que el 3% de la población mundial no siente apetito sexual hacia nada, otra de las tantas definiciones de asexualidad. Sin embargo, algunos asexuales pueden ser atraídos de manera romántica no sexual hacia personas de cualquier sexo.
Otros pueden ser atraídos hacia objetos con los que no se puede mantener un coito, por consiguiente son asexuales… ¡los fetichistas entonces serían una variante de asexualidad!
Se sabe muy poco… pero si estas personas son felices, no sufren y no desean cura… ¿puede ser considerado una enfermedad como muchos afirman?
